Llego
tarde
a la cita del día de la mujer trabajadora, aun así, no quisiera dejar
de comentar la repercusión que tuvieron, para el arte, obras
como The dinner party (1974) de Judy
Chicago, una de las representantes más
controvertidas del movimiento artístico feminista, surgido en la década de los 70 en Estados Unidos. Su
particular interpretación de la Santa Cena, puso de relieve la importancia del
triángulo equilátero como símbolo representativo de la vulva femenina.
No obstante,
si bien es cierto que las artistas feministas de esa época, dotaron al
triángulo de un significado que resaltaba su propia identidad femenina, cabe
decir, que no fueron ellas las primeras en valerse de esta figura geométrica como
símbolo alusivo hacia la mujer, ya que en
la antigüedad, también los sumerios utilizaron pictogramas triangulares para representarla.
Una pictografía triangular significaba mujer. Una especie de semicírculo representaba una montaña. Una "montaña" y una "mujer" significaba "mujer esclava o extranjera" |
Imaginemos, pues, por un momento, qué apariencia triangular más sugerente se
nos revelaría si superpusiéramos la V y la T... ¿He
aquí la transcendencia anímica que posee relacionar el triángulo y la vulva? ¡Seguimos leyéndonos!
Interessant la teva aproximacio a la simbologia, una disciplina que m'agrada especialment. Per invers, hi ha el mateix triangle invertit com a simbol de la masculinitat, uns simbols que s'han mantigut gairebe inalterables entre cultures i epoques
ResponderEliminarCierto Ricard. Ahí tenemos a mi admirada estrella de David, cuyos triángulos opuestos suelen asociarse a lo femenino y masculino. Entiendo además, que esta estrella simboliza a la perfección el principio de correspondencia de Hermes Trimegisto: “Como arriba es abajo; como abajo es arriba." ¡Seguimos leyéndonos!
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